LA PANDEMIA ESTÁ TRANSFORMANDO EL SECTOR DE LA VALORACIÓN

La situación creada por la pandemia está transformando el sector de la valoración, según Francisco Camino, consejero delegado de Arquitasa. A pesar de la caída de la actividad económica debida al Covid-19, ha aumentado la necesidad de valorar todo, para poder conocer la situación antes y después de la crisis sanitaria y de la crisis económica inducida. También han cambiado y van a cambiar más en el futuro, los criterios para valorar todo tipo de bienes y servicios.

¿Cuál es el balance económico y de actividad de la compañía en 2020?

Sorprendentemente desde el punto de vista estrictamente económico y de actividad no ha sido un mal año para el sector de las tasaciones y valoraciones, máxime si tenemos en cuenta que, a efectos prácticos, 2020 ha tenido sólo 10 meses, si descontamos abril y mayo, donde la paralización fue total. 

La pandemia ha movido el mercado inmobiliario entre particulares por diferentes motivos, entre los que podemos destacar, la necesidad de vender de un sector importante de población y por otro el interés por encontrar otros tipos de vivienda que resolvieran mejor toda la situación creada por el Covid 19. 

Por otro lado, la situación sanitaria y económica han provocado un aumento muy importante de las valoraciones debidas a herencias, divorcios, litigios judiciales y otros.

Hemos cerrado el ejercicio 2020 con unos resultados mejores que el 2019, a pesar de la referida pandemia y de la inexistencia de los dos meses antes referidos

Biblioteca pública de Santiago de Compostela. Valorada por Arquitasa Fuente: Ministerio de Cultura y Deporte

¿Cómo está siendo la evolución del presente año?

La evolución de la actividad en el primer trimestre del 2021, está continuando la evolución de la situación vivida en el segundo semestre del 2020, con un ligero, pero constante, aumento de las valoraciones y tasaciones encargadas, aunque con una clara diferenciación territorial. Las valoraciones solicitadas ponen de manifiesto un incremento progresivo de la desigualdad en la actividad económica entre unas zonas y otras. Sigue aumentando de forma preocupante la diferencia entre las grandes ciudades y sus entornos inmediatos con el resto del territorio. La referida desigualdad se da tanto en la actividad como en la valoración de los inmuebles de unos lugares con respecto a otros.

¿Qué perspectivas de facturación y actividad manejan para el resto del año?

Esperamos mantener la línea de ligero, pero constante aumento tanto de actividad como de facturación, mientras se mantenga la situación actual. Debemos seguir implementando medidas para resistir la delicada situación general, pero tenemos grandes esperanzas de que la situación mejore después del verano, con una gran parte de la población vacunada y un regreso a una cierta normalidad de la actividad económica, aunque, por desgracia, esa previsible recuperación no va a ser igual en las diferentes zonas antes referidas.

¿Qué peso tienen cada una de las áreas dentro de la compañía? ¿Se quieren incorporar nuevas?

Como todas las empresas Arquitasa ha evolucionado y se ha transformado mucho en los últimos años. Queremos ser una empresa moderna, comprometida con la sociedad y con determinados valores. Trabajamos desarrollando métodos de ‘inteligencia colectiva’, huyendo de antiguos esquemas de áreas estancas que no se relacionan entre sí. Todas las áreas están relacionadas y todas son importantes. 

Por supuesto, damos mucha importancia al área comercial y a la atención y cercanía con el cliente. Tratamos de que el área técnica esté muy preparada, continuamente reciclada y puesta al día, que se complemente muy bien y podamos dar un servicio que cubra todo el territorio y todas las posibles especialidades sectorial, haciéndolo con rigor, con transparencia, pero también con agilidad y eficiencia.

También damos mucha importancia al área de comunicación, desde donde queremos tener informados a nuestros clientes y a la sociedad en general sobre todos los aspectos que contribuyen a aumentar el valor, en un sentido amplio, de nuestras viviendas, de nuestros barrios y de nuestras ciudades.

¿Qué servicios demandan más los clientes en la actualidad?

Con la transformación digital y las nuevas tecnologías la relación con nuestros clientes finales es mucho más directa, pero también mucho más exigente. Nos piden veracidad, fiabilidad y transparencia tanto en nuestros informes como en nuestras valoraciones. Pero también nos solicitan agilidad y cercanía.

Nos solicitan todo tipo de tasaciones de todo tipo de inmuebles, pero también nos solicitan valorar muchos bienes y servicios, como explotaciones económicas, fondos de comercio, marcas y otros. También es muy variada la finalidad para las que nuestros clientes nos encargan valoraciones. Aunque el peso de las tasaciones hipotecarias sigue siendo grande, destacamos las valoraciones que nos solicitan para reclamaciones ante las distintas administraciones, para litigios judiciales, para separación de bienes, para repartos de herencia, para expropiaciones en procesos urbanísticos.

Tenemos también muchas solicitudes de informes territoriales y sectoriales, tanto de administraciones públicas como de empresas privada. Así mismo nos piden labores de asesoramiento, sobre todo en cuestiones de transformaciones urbanísticas. También nos solicitan asesoramiento siempre que se trata de valorar inmuebles singulares, ya sea por su calidad arquitectónica, como por su valor histórico, cultural o de cualquier otra índole.

¿Cuáles son los principales avances tecnológicos y digitales de la compañía?

Arquitasa ya trabajaba con medios telemáticos y digitales antes de la pandemia. Utilizamos todo tipo de herramientas digitales que nos ayuden a poder trabajar en equipo, desde cualquier lugar para cualquier sitio, con cercanía y eficiencia. Y poco a poco vamos incorporando los diferentes adelantos que se van produciendo, como la incorporación de drones para las valoraciones urbanísticas o agrícolas.