El valor de una tasación no solo refleja el costo material de un bien, sino que también asegura su protección y resguardo en situaciones imprevistas.
En el mundo cambiante de hoy, entender el verdadero valor de asegurar una propiedad va más allá de cifras estáticas; implica salvaguardar la inversión y el patrimonio ante cualquier eventualidad. Descubre en este post por qué el valor de seguro de una tasación es crucial en la protección de tu activo más preciado.
Otros valores:
- Valor de mercado
- Valor de referencia
- Valor catastral
- Valor residual
- Valor de amortización
- Valor de tasación
- Valor hipotecario
- Valor por comparación
- Valor por actualización de renta
- Valor de remplazamiento
- Valor por la hipótesis de edificio terminado
- Valor razonable
Indice de contenidos
Valor asegurable de un inmueble
No todas las viviendas están aseguradas, con los riesgos que ello conlleva. Se estima en ocho millones el número de viviendas que no tienen contratado un “seguro de hogar”. Pero el principal problema surge cuando comprobamos que la mayoría de los inmuebles están asegurados por un importe muy inferior al de su valor real. Normalmente cuando se adquiere una vivienda se contrata una póliza que asegura tanto el contenido como el continente. Para que el aseguramiento salga más económico se suele declarar un valor bastante inferior de la vivienda al pagado por su compra. Según los estudios estadísticos de Arquitasa, confeccionados con los datos de los “informes de tasación” que nos demandan particulares o Compañías Aseguradoras, tras producirse algún tipo de siniestro, la valoración de la vivienda suele llegar al doble del valor asegurado, por lo que las referidas Compañías sólo se hacen cargo de la mitad de los importes que tendrían que pagar si los inmuebles hubieran estado correctamente asegurados
Tasaciones para cobertura de seguros.
Un valor a efectos de seguro
Esta situación cambia cuando la vivienda se adquiere mediante un crédito hipotecario. Aquí la entidad financiera obliga a contratar un seguro por, al menos, el valor de tasación de la vivienda, que garantice la recuperación de las cantidades adeudadas en caso de un hipotético siniestro. En las tasaciones realizadas por Sociedades Homologadas, se establece, dentro de la propia valoración un “valor a efectos de seguro”, que es el que se tiene en cuenta para contratar la preceptiva póliza. Las entidades financieras suelen obligar también a suscribir seguros de vida, con que dejan todo “atado y bien atado”, es decir, recuperarían el dinero adeudado tanto si le ocurriera algo al inmueble, como al dueño del mismo y además sería el cliente el que lo pagaría todo
Las entidades financieras tienen las espaldas cubiertas
Las Compañías de Seguros y Reaseguros están obligadas a realizar valoraciones anuales de todos sus inmuebles y del conjunto de su patrimonio, lo que garantiza su solvencia y su capacidad para hacer frente a los posibles siniestros de los activos que aseguran. Por lo tanto, siempre que existan créditos hipotecarios, podemos afirmar que “el mundo del seguro tiene muchas seguridad”, las entidades financieras siempre recuperarían el dinero, en caso de un siniestro, asegurado por unas Compañías con grandes patrimonios que garantizan la estabilidad del sistema, que es supervisado tanto por la Dirección General del Seguro , como por el Banco de España que controla las valoraciones realizadas por las Sociedades de Tasación.
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